Travesia por La Tinença de Benifassa

Este fin de semana lo hemos pasado en La Tinença de Benifassa,  el viernes noche dormimos en el hotel de montaña de El Molí de l'Abad, y el sábado a primera hora subimos con el coche a la cabeza del Pantano de Ulldecona, aparcamos allí, y empezamos a remontar el valle del Rio Senia.

Subimos por pista hasta la senda que nos llevará al Pi Gros, un pino centenario de tamaño descomunal. Es digno de mención el curioso el arreglo que le han hecho con esparragos metálicos y pletinas, después de que un rayo lo partiera en dos.

Después de visitarlo, seguimos hacia la Fageda del Retaule en busca del segundo árbol monumental que visitaremos, el Faig Pare.

Este año, debido a los fuertes vientos de semanas anteriores, el hayedo no estaba tan bonito como otras veces. Lamentablemente, quedaban muy pocas hojas en el suelo y se había perdido un poco el toque otoñal que recordaba de la última vez que lo visité. En cambio, la vaguada donde está el Faig Pare estaba espectacular, es una visita obligada si se está por la zona.

Tras comer algo, continuamos pista hacia el Refugio del Mas del Flare, aquí cogeremos el GR-7 que nos llevará al Refugio de la Font Ferrera, donde pasaremos la noche.

El domingo de mañana seguimos dirección Fredes, siguiendo el GR. Una vez allí, nos desviamos buscando el Portell del Infern. Tras unos 7 km de bajada por senda llegamos de nuevo a los coches, total, unos 40 kilómetros que recomiendo a todo aquel que le gusten las montañas ;-)

El track y los datos de la ruta los podeís ver en: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=1305698

Y aquí el resto de fotos:

Mamanuca Islands

Para acabar este largo viaje decidimos quedarnos unos días en una cabaña en la Isla Tokoriki, la isla más al norte de las "Mamanuca Islands".

Tokoriki es una pequeña isla, con una playa preciosa, en la que se ha construido un pequeñito resort con cabañas individuales frente a la playa. Nuestra cabaña era una pasada, con su terrazita en la playa, sus tumbonas, incluso teníamos un par de hamacas colgadas de las palmeras ;-). Además de las cabañas, había un Bure principal (cabaña mas grande) donde había una pequeña biblioteca al aire libre y un restaurante.

Estos días los hemos dedicado a descansar y relajarnos, además hemos aprovechado para bucear por toda la isla, muy famosa por sus arrecifes coralinos y su variopinta fauna marina. Lo que nos dijeron de los tiburones no era broma y en varias ocasiones estuvimos buceando junto a ellos (je, je, la verdad es que no eran muy, muy grandes (alrededor de unos 2 metros) y se supone que inofensivos, pero impresionaba lo suyo cuando los veías ahí abajo...)

La verdad es que ha sido todo un acierto acabar nuestro viaje por NZ aquí, os dejamos con algunas fotos...

je, je, esto es vida...

puesta de sol desde nuestra terraza

restaurante con buenas vistas

Monika en la piscina "desbordante"

la cabaña

Próximo destino: Fiji

Bueno, acabamos de aterrizar en Nadi, capital de la República de las Islas Fiji. El país está compuesto por un archipiélago de más 300 islas, de las cuales 110 están permanentemente habitadas, y más de 500 islotes, cubriendo un área total de 18.300 km2.

Nadi desde el aire

En particular nosotros vamos (con el cacharro ese que veis aquí abajo) a Tokoriki. Ahora toca relajarse un poco y descansar!!!

El hidroavión que nos llevará desde Nadi a Tokoriki

Segundo intento: Tongariro Alpine Crossing

Ayer llegamos por la noche a Whakapapa y se volvió a poner a nevar, desde luego que la cosa no pintaba bien, aunque por la noche pareció que se despejaba, así que nos acostamos con alguna esperanza de poder hacer por la mañana la travesía por el Parque Nacional.

Por la mañana nos levantamos lloviendo, pasamos por el centro de información para ver la previsión del tiempo, más agua (nieve a partir de 900 m) y viento. De todos modos, decidimos ir al principio de la ruta y allí decidir que hacemos. Cuando llegamos, sigue lloviendo, así que esperamos un poco en la caravana a que pare un poco, finalmente, hemos decidido intentarlo, dado que no tenemos transporte para que nos devuelva al principio de la ruta (no es circular), subiremos hasta donde podamos y volveremos por donde hemos venido.


La idea era subir hasta el South Crater, desde donde podríamos ver los Lagos Esmeralda, y las cimas de los volcanes Tongariro (1967 m.) y Ngauruhoe (2291 m.). Nada más empezar la cosa no se veía mal, algo de viento, y algún rastro de nieve, aunque la visibilidad era muy mala. A medida que hemos ido subiendo ha aumentado la cantidad de nieve, y cada vez teníamos menos esperanzas de que el tiempo nos diera un tregua y nos dejara ver algo.


Finalmente nos hemos quedado justo antes del collado que forman los dos volcanes, en la ladera del Monte Tongariro. La cantidad de nieve que había (nos hundiamos hasta las rodillas) y el pensar que aunque subieramos no ibamos a ver nada, nos ha desanimado y hemos decidido ser prudentes y volvernos.

en las faldas del Tongariro

Ya de vuelta ha empezado a llover, por lo que además de decepcionados hemos llegado empapados a la caravana. En fin, que no ha podido ser, ¿será esto una señal para que volvamos? ;-)

Wai-O-Tapu

Hoy seguimos en Rotorua y el plan es seguir con el tema volcánico, a primera hora de la mañana queremos visitar el Wai-O-Pu, una de las reservas termales más famosas de la zona. Sobretodo es conocida por la "Champagne Pool" (ver foto de abajo) y el géiser "Lady Knox" que hace erupción (provocada, con lo que pierde un poco de encanto al ver al tio aparecer por allí y tirar dentro las pastillitas de jabón ecológico) a las 10:15. La verdad es que la visita merece la pena, en un área reducida se pueden ver distintos fenómenos volcánicos, incluidos diversos cráteres, formaciones minerales de diversos colores (en función de su composición), lagunas de barro burbujeante (muy curioso el ruido que hacen) y todo esto acompañado por los vapores que salen por todas partes con su característico "aroma".

"Champagne Pool"

Geiser "Lady Knox"

Despues de esta visita hemos vuelto al pueblo ya que teníamos pensado darnos una vuelta en bici por el bosque de Whakarewarewa, famoso por la cantidad de senderos habilitados para la BTT (más de 100 km). Desafortunadamente, la lluvia nos ha fastiado el plan (a unos más que a otros ;-) y nos hemos quedado sin hacer el "Singletrack Heaven". Para los aficionados al ciclismo de montaña os diré que toda la zona de Rotorua y alrededores es famosa por sus rutas, de hecho en Rotorua, un pueblo de unos 70.000 habitantes hay más de 6 tiendas de ciclismo, todas provistas de unas instalaciones y un material excepcional (aparte de marcas "generalistas", me harté de ver Titus, Santa Cruz, Yeti, Ellsworth, Turner, etc. mención especial para la nomad carbon negra montada en xtr-fox 2011, je, je, "pata negra").

Como alternativa al plan anulado, fuimos a ver el pueblo sepultado de Te Wairoa, que es donde se produjo uno de los sucesos naturales más dramáticos del país en los últimos 150 años: la erupción del Monte Tarawera en 1886. La zona era muy famosa porque es donde estaban las "White and Pink Terraces" que eran unas terrazas de agua termal formadas por los depositos de sílice que el agua volcánica iba dejando a su paso. Un pequeño museo explica la historia de la erupción y un paseo por la zona muestra algunas casas reconstruidas y poco más. La verdad es que nos decepcionó bastante.

Por la tarde, despues de comer (probamos la carne de venado a la piedra), salimos hacia el Torangariro para darle una segunda oportunidad. ¡¡¡A ver si esta vez el tiempo nos acompaña y podemos hacer la travesía!!!

Rotorua

Rotorua es el destino turístico más famoso de NZ, aquí, la vida cotidiana se desarrolla junto a fuentes termales, géiseres, piscinas de barro burbujeante y nubes de gas sulfuroso que dan un aroma poco más que peculiar a la ciudad.

Desde luego que no se puede negar que Rotorua es una ciudad que impacta al viajero, nada más llegar te golpea un olor a huevos podridos, no por nada la llaman "Sulfure City". A primera hora, hemos dado una vuelta por el núcleo urbano y ya nos han sorprendido unas fumarolas y lagos de lodo en el parque del centro. Después de esto, hemos ido a ver el "Agrodome", una especie de granja ecológica abierta al público, donde te enseñan todas las razas de oveja del país, como las trasquilan, el funcionamiento de una plantación de kiwis (con degustación), incluso hemos dado de comer a los avestruces, vacas, alpacas, ovejas, llamas y demás bicho viviente con el que trabajan los granjeros de aquí (je, je, ya os imaginareis de quien ha sido la idea de venir).

Ya por la tarde hemos ido al Valle volcánico de Waimangu, creado en 1886 por la erupción del monte Tarawera. Dando un paseo valle abajo hemos visto varios y espectaculares accidentes termales y volcánicos, incluido el "Inferno Crater Lake", donde el agua alcanza los 80ºC y el "Frying Pan Lake", la mayor fuente termal del mundo.

Lago color Yeti (turquesa) de Inferno Crater

Frying Pan Lake

Ahora mismo acabamos de llegar al camping, y como no podía ser de otra manera tienen piscinas termales, así que os dejamos que nos tenemos que poner el bañador.

Península de Coromandel

Esta mañana nos hemos levantado en Thames, puerta de entrada a la Península de Coromandel. Después de cargar de agua los depositos de la caravana hemos salido dirección norte en busca de las mejores playas de arena blanca de la isla norte.

Tanto la carretera como el entorno son muy parecidos a la Península de Otago, una carretera que más que muchas curvas, lo que no tiene es ninguna recta, que va pegada al mar sin ningún tipo de protección. Eso sí, las playas preciosas.


A media mañana hemos parado en Ciudad de Coromandel, pueblo famoso por sus mejillones ahumados. En una tienda hemos comprado mejillones ahumados con dos salsas distintas, atún ahumado y un queso azul ecológico hecho en una granja de aquí. La verdad es que estaba todo muy bueno, je, je, aunque los mejillones repetían un poco.

Después del aperitivo "ahumado" hemos cogido la "309 Road" que atraviesa las montañas durante 21 km. A lo largo de este itinerario hemos parado en las Cascadas Waiau, de 10 metros de altura, y en una arboleda de kauris, unos árboles gigantes de más de 600 años con unos troncos con diámetros superiores a los 6 metros (aquí los ingleses hicieron un buen trabajo de tala porque al parecer toda la península estaba cubierta por un bosque enorme de estos árboles).

Ya por la tarde hemos pasado por las playas de The Cave, donde un grandísimo arco de roca une dos playas preciosas y por la "Hot Water Beach" (Playa del agua caliente), donde escarbando un poco en la arena surge del suelo agua a 60ºC y la gente se hace unas piscinitas spa de los más majas (al parece hay dos manantiales de aguas volcánicas justo bajo la orilla del mar).


Ya por la tarde hemos salido hacia Roturua, el destino turístico más famoso del país.

Al mal tiempo, cambio de planes... Auckland

Anoche nos acostamos en el camping de Whakapapa (Tongariro National Park) nevando, además las previsiones para hoy eran muy malas. Cuando nos hemos levantado, hace frio, nieva un poco y por si fuera poco, hace un viento muy fuerte.

De todos modos, a primera hora, nos acercamos al centro de información del parque, ya que la idea que teníamos era hacer el "Tongariro Alpine Crossing" que es una travesía a pateo de un día que cruza todo el parque. Nos dicen que la cosa está muy fea, y nos recomiendan no hacerlo, así que nos toca replanificar.

Dado que tenemos muchas ganas de hacer la travesía, y para mañana tampoco pinta bien, decidimos subirnos hasta Auckland, para luego, pasando por la Península de Coromandel, bajar hasta Rotorua, y de este modo volver a Tongariro el viernes o sábado para ver si ha mejorado el tiempo.

Así que dicho y hecho, a las 08:15 ya estamos de camino y unas 4 horas despues llegamos a Auckland.

Auckland es una gran ciudad construida sobre 50 antiguos volcanes, todo la zona de ambiente está alrededor del puerto (tambíen han sido sede de la Copa América, pero me temo que con más "picardía" que nosotros). Despues del paseo de rigor por la ciudad subimos a la Sky Tower, que, con 328 metros es la construcción más alta del hemisfério sur. Las vistas desde arriba son impresionantes, pero lo mejor ha sido cuando estabamos en el mirador y hemos visto un tio ¡¡¡cayendo al vacío!!!!. Resulta que para los más atrevidos ofrecen la actividad de saltar desde arriba, una especie de puenting pero a lo bestia, en fin, a mi que no me miren.

Salto al vacío desde la Sky Tower

Mirador de la Sky Tower

Auckland desde el aire

Ya por la tarde hemos esperado a que oscureciera para ver la torre iluminada, pero tampoco nos ha parecido nada del otro mundo, ya que esperabamos algo más espectacular del estilo de la Torre Eiffel o algo así.

Catholic Cathedral of St. Patrick

Para dormir hemos ido a Thames, en la Península de Coromandel, famoso por ser un asentamiento de hippies, y gente muy liberal.

Cuevas de Waitomo

Waitomo y sus alredores son famosos por estar llenos de grietas que se abren directamente hasta un sistema de cuevas y riachuelos subterráneos. En total se conocen más de trescientas de estas cuevas, de las cuales hemos visitado:

Glow-worm Cave (Cueva de las luciérnagas): cueva enorme en la que destacan: una sala llamada "La Catedral", famosa por sus dimensiones y por la acústica que tiene (hasta los Niños Cantores de Viena han actuado allí), y un paseo en barca que nos han dado por una sala completamente a oscuras en la que se veían en el techo millones de luciérnagas. La verdad es que es muy curioso, ya que era como estar viendo un cielo estrellado.

Araui Cave: cueva seca en la que destacan un increíble catalogo de formaciones calizas (de un color muy blanco). Aquí son famosas las estalacticas "paja", que son unas estalactitas muy finas que llenaban todos los techos.


Ruakuri Cave: esta cueva era un antiguo cementerio maori, por lo que han hecho una enorme escalera de caracol para acceder dentro sin pisar el suelo funerario. Tiene unos 8 km de largo, aunque la visita no llega a los dos kilómetros (65 metros de profundidad). Hemos visto enormes cavernas con luciérnagas, cascadas subterréneas, además de muchisimas estalacticas y estalagmitas.

En total han sido unas 4 horas de visita, tras las cuales hemos comido algo en la caravana y hemos salido dirección al Tongariro National Park, que visitaremos mañana. Esperemos tener mejor suerte con el tiempo, hoy ha estado lloviendo practicamente todo el día (je, je, aunque dentro de las cuevas no molestaba nada) y ahora mismo, que estamos ya en Tongariro, está nevando!!!

Wellington

Esta mañana hemos madrugado para coger el ferry que nos cruzará a la isla norte. Dicho ferry sale desde la localidad de Picton (de la que no hemos visto nada porque llegamos anoche desde Motueka) y te deja, atravesando el Estrecho de Cook, en la capital del país, Wellington.

La movida de embarcar con la caravana ha sido más sencilla de lo que esperabamos, un poco de cola para entrar y luego nos han hecho aparcar en la bodega y dejar allí el coche para subir a la zona de pasajeros del barco. El viaje son unas tres horas, así que hemos aprovechado para leer un poco y comer algo.

Al llegar a Wellington hemos aparcado en la zona del puerto y ya nada más llegar hemos notado un cambio en el ambiente, después de estar en nucleos urbanos de como mucho 40.000 habitantes, Wellington nos ha parecido una gran ciudad (aunque solo tiene unos 164.000 habitantes).

La ciudad está situada en las faldas de unas colinas y en torno a un puerto natural con mucho ambiente. Dando un paseo desde el puerto hemos visitado el Te Papa, el museo de historía y cultura del país, luego hemos dado una vuelta por el centro, donde hemos comido algo y nos hemos "empapado" un poco del ambientillo urbanita que teníamos un poco olvidado.

Wellington desde el puerto

Ya por la tarde hemos vuelto a la carretera, ya que mañana nos gustaría visitar las Cuevas de Waitomo y queremos adelantar un poco de camino.

Abel Tasman National Park

Para visitar el parque hemos decidido coger un "water taxi" que nos llevará hasta el extremo norte de este para visitar las colonias de focas y, ya de vuelta, nos dejará en una bahía desde donde podremos hacer andando parte de la ruta "Abel Tasman Track". Lo más curioso del parque es el color de la arena de las playas, de un dorado muy pronunciado, que al parecer es debido a la composición geológica del suelo, que contrasta muchísimo con el verde la vegetación y el azul del agua.

El viaje de ida ha sido muy movido, el mar estaba picadísmo y el catamarán en el que ibamos iba pegando unas cabezadas que te levantaban el culo del asiento, Monika se lo ha pasado en grande, pero yo he estado a punto de echar hasta la primera papilla.

El pateo que hemos hecho iba siguiendo la línea de la costa y asomandose a distintas calas donde había paradisiacas playas de arena dorada, lástima que ha llovido durante un buen rato y no lo hemos podido disfrutar como nos hubiera gustado. Este parque tambien es famoso porque es una reserva de aves, aunque como no entendemos mucho del tema no hemos sabido apreciarlo.


Al parecer esta zona de NZ es el destino favorito de la gente de aquí para pasar las vacaciones de verano, desde luego las playas son increibles, todas rodeadas de bosque y con una aspecto muy "salvaje", aunque me parece que la temperatura del agua no debe ser como la del Mediterraneo...

Ya por la tarde nos ha recogido de nuevo el taxi "aquático" y nos ha llevado de vuelta a la costa (no os lo he dicho antes, pero el acceso al parque está muy controlado, y la mejor forma de visitarlo es por mar).


De nuevo en la caravana, hemos salido con destino a Picton, donde mañana cogeremos el ferry que nos llevará a Wellington, ya en la isla norte.

Atrás quedan 3.000 km por la isla sur, todo un lujo para los cinco sentidos ;-)

Punakaiki - Buller - Motueka

Ayer después de comer salimos de Frank Joseph dirección Punakiki, donde está el Paparona National Park y sus famosas "Pancake Rocks". Teniamos pensado pasar la noche allí, para así, llegar pronto al parque.

Al llegar al pueblo, estuvimos buscando sitio donde aparcar y pasar la noche, pero dado que no encontramos nada, acabamos en un cutre-motor camp. Las instalaciones no eran nada del otro mundo, pero por lo menos era barato y como solo ibamos de paso, nos sirvió para dormir, llenar el depósito de agua y cargar las baterias de la caravana. Por la mañana, ha amanecido nublado, pero por lo menos no llueve, así que, tras desayunar, salimos hacia el Parque Natural donde están las formaciones rocosas con forma de montaña de crepes, las "Pancake Rocks".

A las formaciones rocosas en cuestión se llega tras un paseo por el típico bosque de aquí, muy húmedo, de vegetación muy espesa y lleno de musgo. El Paparona National Park está en una zona costera donde la montaña se encuentra con el mar creando piscinas, cortados, puentes, etc. de caprichosas formas. Hay un senda habilitada para recorrerlas todas, pasando tambien por unas grietas por donde el mar silba y escupe agua cuando las condiciones de la marea son propicias.


Despues de esto, nos subimos a la caravana para seguir haciendo camino, ya que hoy va a ser uno de los días con más kilómetros a recorrer. La idea es llegar a domir a las inmediaciones del Parque Natural de Abel Tasman.

De camino a Motueka, paramos en la garganta del rio Buller para cruzar el puente colgante más largo de Nueva Zelanda, con 110 metros. La verdad es que, pese a que ya habíamos cruzado varios en la zona de Fiorland, impresionaba bastante, era muy estrecho y bastante inestable, y aunque estaba todo cerrado (era imposible caerse), ibamos "bien agarraditos" a los laterales :-D

Ya en Motueka, buscamos un Motor Camp donde pasar la noche y nos vamos a cenar a The Ghotic, una antigua iglesia presbiteriana que se rehabilitó como restaurante, famoso por su carne a la piedra. Para cenar tomamos la sopa del día, que resultó ser de cebolla y como plato principal Monika pidió vieiras y yo la especialidad de la casa: un solomillo de 500 gr que me sacaron completamente crudo con su correspondiente piedra caliente para que me lo cocinara a mi gusto...

je, je, como imaginareis dimos buena cuenta de todo. Para acabar de rellenar huecos tomamos de postre: helado (una montaña) y una pudding de manzana que también estaba muy bueno.

El plan para mañana es visitar el "Abel Tasman National Park", así que nos vamos a dormir.

Wanaka - Playa de Monro - Glaciar de Fox - Frank Joseph

Hoy hemos amanecido bajo una tormenta, por lo que nuestros planes de hacer un pateo por el Parque Nacional de Mount Aspirin se han ido al garete. Como no tenía pinta de parar pronto y además, el camino por el que habiamos llegado hasta aquí no estaba en muy buenas condiciones, hemos decidido no arriesgarnos y volvernos a Wanaka. Una vez allí, y dado que seguía lloviendo, hemos continuado conduciendo hacía la costa oeste, donde queríamos visitar la zona de los glaciares.

Prácticamente ha estado lloviendo todo el camino, pero aprovechando una tregua que nos ha dado el agua hemos ido a visitar Monro Beach, una playa de grava donde hay una colonia de osos marinos a la que se llega por una senda muy chula que atraviesa una especie de bosque tropical.


De vuelta a la caravana hemos comido, con siesta incluida, en una zona con vistas a un lago. Tras este merecido descanso, hemos continuado hasta llegar al pueblo de Fox Glacier, que son cuatro casas al lado de la carretera. Pese a que este glaciar es menos conocido que su hermano Frank Joseph, es impresionante, además contrasta mucho ver un glaciar rodeado de bosques de aspecto tropical.


Para dormir hemos hecho los 29 kilómetros que nos separan del pueblo de Frank Joseph, ya que el plan para mañana promete ser emocionante... a ver si tenemos suerte con el tiempo.

Heli Hike en el glaciar de Frank Joseph

Pues si, al final nos decidimos a probar lo del Heli Hike, actividad muy ofertada aquí, que consiste en que te suben con un helicoptero al glaciar y luego vas a dar un pateillo por allí acompañado de un guía (2 horas).

Antes de salir te proporcionan unos crampones ya que todo la parte de andar se hará sobre hielo. Despues de la charla con el tema de medidas de seguridad a la hora de subir y bajar del helicoptero, nos llevan al helipuerto, je, je, la verdad es que nunca habíamos subido en un trasto de estos y estabamos algo "nerviosos".

Nos subimos, cinturones de seguridad, cascos y para arriba. La verdad es que el despegue no da ninguna impresión, es muy suave y una vez en el aire no da sensación de inestabilidad, aunque vibra un poco y hace mucho ruido.

Nada más despegar, sobrevolamos el pueblo y embocamos la salida del glaciar, afortunadamente, las nubes han dado un respiro y, desde arriba, las vistas del glaciar son impresionantes. Cuando llegamos a la cabeza del glaciar el piloto se da unas pasadas (que a nosotros nos han parecido muy bajas) por la zona de seracs, realmente muy chulo.


Despues de esto, hemos aterrizado en un zona llana donde nos esperaba el guía. Allí, nos hemos puesto los crampones, y hemos dado una vuelta por la zona de arriba del glaciar, hemos visto las distintas partes, así como los tuneles y grietas que forma el agua (incluso hemos pasado por dentro de algunas de ellas). Al acabar, otra de vez de vuelta al pueblo con el helicóptero. La verdad es que ha sido muy divertido, actividad totalmente recomendable ;-)


Al terminar el Heli Hike hemos comido en el pueblo y de nuevo a la carretera, la idea es parar a dormir en Punakaiki, donde están las "Pancake Rocks", aunque eso lo dejaremos para mañana.

Queenstown - Arrowtown - Wanaka

Hoy no hemos madrugado tanto.....nos hemos levantado a las 07:00 h porque a las 08:30 habíamos contratado un descenso en Jet boat por el río Sothover. No hay palabras, impresionante!

La actividad consiste en que suben a 7 empanados en una lancha motora de 500 CV y te lanzan a toda leche encajonado en el cañón del río y haciendo trompos de 360 º. Además, para darle mas emoción....el conductor se pega todo lo que puede a las paredes de roca, con lo que parece que te vas a estrellar. Cuando hemos bajado....me temblaban las piernas (a Mónika).

Después hemos dado una vuelta por "la ciudad" (tiene 8500 habitantes), hemos subido a la Ski Gondola para ver las vistas y nos hemos ido rumbo a Arrowtown.

Este pueblo es un antiguo asentamiento minero de buscadores de oro. El pueblo tiene solo 2 calles....pero que calles! Parece un pueblo del oeste.....y hemos encontrado una heladería y una pastelería alucinantes!

Paco se ha tomado un helado gigante con el cucurucho hecho en el acto! Estaba increíble.
Después hemos ido a la panadería donde nos hemos comprado para cenar la famosa pie de NZ. Es una tartaleta de hojaldre rellena de carne. Paco se la ha pedido de estofado de ternera y yo de ternera a la menta. Estaban muy buenas.......pero yo ya he llegado a mi "cupo" máximo de carne y he cogido un poco de empacho....creo que pasaran varios días hasta que vuelva a comer carne!

Luego hemos ido rumbo a Wanaka, hemos cogido una carretera llamada la "Alpine scenic route". Es una carretera de montaña con unas vistas alucinantes!. Parecía que estábamos viendo una postal...los campos verdes con sus ovejas y las montañas todas nevaditas...la verdad es que es muy bonito.

Al llegar a Wanaka hemos cogido una carretera rumbo al Monte Aspiring porque queríamos hacer una ruta de 5 horas al día siguiente.......pero la hemos liado pardisíma!
De los 50 Km que hemos hecho, unos 30 km eran por pista sin asfaltar.....creíamos que la caravana se nos desmontaba!!! cuando ya estábamos llegando al final de la carretera, de repente un riachuelo (bueno, era mas bien un río) no nos dejaba pasar con la furgo y decidimos quedarnos a dormir en una explanada......
Una cosa que nos ha llamado mucho la atención es que aquí no hay contaminación lumínica...cuando se hace de noche....se hace de noche. No hay luces de farolas, de casas...solo se ve la luz de las estrellas, la luna y punto!

Milford Sound

Hoy nos hemos levantado a los pies del Lago Ada, el entorno es increible, estamos rodeados por escarpadas paredes coronadas por nieve y bosques de hayas, lástima que han venido a visitarnos las famosas "Sandflies", moscas de la arena, que deben ser primas hermanas de las moscas "cojoneras".

Como siempre hemos madrugado y después de desayunar hemos ido a ver "The Chasm", una zona de bosque donde el rio Cleddau ha erosionado una zona de rocas dándoles curiosas formas y creando una estrecha sima por donde se precipita el agua. Desde aquí tambien se ve el Monte Tuoko (2746 m.) que sale por encima del hayedo que hay antes de Milford.




Después de esto, hemos ido rio abajo hasta llegar a Milford Sound. La primera impresión del fiordo de Milford deja huella: aguas negras muy calmadas desde las que se elevan altisimos cortados de piedra, donde los bosques se aferran entre caidas de agua. Además, hoy había zonas con nubes bajas que se agarraban a la roca dándole al paisaje un aspecto todavía más impresionante.


Nada más llegar, hemos ido a la zona de embarque de los cruceros ya que teníamos pensado hacer un crucero de dos horas por el fiordo. Afortunadamente, no había mucha gente y hemos podido coger uno de los barcos pequeños (habíamos leido que se pegaban más a las paredes del fiordo). El crucero nos ha gustado mucho, sobretodo por las vistas que te brinda (hasta debajo de una cascada nos han metido), y también porque hemos visto una colonía de leones marinos y algunos pinguinos!!!



Al terminar el crucero hemos salido para Queenstown, por lo que nos tocaba deshacer el camino desde Te Anau y desde allí subir hacía el norte durante unos 100 km más. Próxima parada... la capital mundial de los deportes de riesgo... (o eso dicen).

Te Anau - Milford Sound

Te Anau es el punto de inicio donde salen todos los visitantes del Parque Nacional de Fiorland, por lo que por primera vez desde que llegamos a NZ, vemos movimiento de turistas. Es un pequeño pueblo situado junto a un lago enorme, el Lago Te Anau, el 2º más grande de NZ, lleno de campings, moteles y demás servicios turísticos.

Fiorland (tierra de fiordos), constituye la zona de naturaleza más agreste del país, una región abrupta, montañosa, muy arbolada y partida por numerosos estrechos que se alejan a lo largo de muchos kilómetros hasta llegar al Mar de Tasmania. Además, todo el parque está repleto de rutas para hacer senderismo (tramping, como lo llaman aquí), entre ellas el famoso Milford Track. Como os podreís imaginar, estamos en nuestra salsa.

Como siempre, nos levantamos a las 06:00, desayunamos en la caravana y salimos. La carretera que une Te Anau con Milford Sound no tiene salida, pero sus 121 km nos costará olvidarlos. Es una carretera que serpentea entre densos bosques de hayas, brindando vistas de fabulosas montañas y cañones esculpidos por glaciares. Por si esto fuera poco, cada pocos kilómetros te van apareciendo lugares de interés, como los Mirror Lakes, el Lago Gunn con su increible bosque de hayas plateadas (completamente invadidas de musgo), las Cascadas Humboldt, etc.

Además de visitar todos estos sitios, también hicimos una ruta hasta coronar un el Key Summit, donde se suponía que ibamos a tener unas vistas espectaculares de los tres valles que se despliegan desde arriba, pero como veis en las fotos, la niebla no nos ha dejado ver gran cosa (podemos corroborar que lo que leimos antes de venir respecto al tema de las lluvias en esta zona es completamente cierto ;-).


Antes de llegar al Milford Sound, la carretera nos deja en el tunel de Homer, que atraviesa un espectacular anfiteatro de elevados cortados esculpidos por el hielo. Este tunel tiene la entrada custodiada por una bandada de "Keas" (son como loros negros gigantes) que como se te ocurra parar para hacer alguna foto, no dudarán en perseguirte para ver si les das algo de comida (luego nos hemos enterado que son famosos por comerse las gomas de los limpiaparabrisas de los coches!!!).


Al cruzar el tunel bajamos de nuevo al fondo del valle, donde empieza el Fiordo de Milford, pero esto lo dejaremos para mañana...