Te Anau es el punto de inicio donde salen todos los visitantes del Parque Nacional de Fiorland, por lo que por primera vez desde que llegamos a NZ, vemos movimiento de turistas. Es un pequeño pueblo situado junto a un lago enorme, el Lago Te Anau, el 2º más grande de NZ, lleno de campings, moteles y demás servicios turísticos.
Fiorland (tierra de fiordos), constituye la zona de naturaleza más agreste del país, una región abrupta, montañosa, muy arbolada y partida por numerosos estrechos que se alejan a lo largo de muchos kilómetros hasta llegar al Mar de Tasmania. Además, todo el parque está repleto de rutas para hacer senderismo (tramping, como lo llaman aquí), entre ellas el famoso Milford Track. Como os podreís imaginar, estamos en nuestra salsa.
Como siempre, nos levantamos a las 06:00, desayunamos en la caravana y salimos. La carretera que une Te Anau con Milford Sound no tiene salida, pero sus 121 km nos costará olvidarlos. Es una carretera que serpentea entre densos bosques de hayas, brindando vistas de fabulosas montañas y cañones esculpidos por glaciares. Por si esto fuera poco, cada pocos kilómetros te van apareciendo lugares de interés, como los Mirror Lakes, el Lago Gunn con su increible bosque de hayas plateadas (completamente invadidas de musgo), las Cascadas Humboldt, etc.
Además de visitar todos estos sitios, también hicimos una ruta hasta coronar un el Key Summit, donde se suponía que ibamos a tener unas vistas espectaculares de los tres valles que se despliegan desde arriba, pero como veis en las fotos, la niebla no nos ha dejado ver gran cosa (podemos corroborar que lo que leimos antes de venir respecto al tema de las lluvias en esta zona es completamente cierto ;-).
Antes de llegar al Milford Sound, la carretera nos deja en el tunel de Homer, que atraviesa un espectacular anfiteatro de elevados cortados esculpidos por el hielo. Este tunel tiene la entrada custodiada por una bandada de "Keas" (son como loros negros gigantes) que como se te ocurra parar para hacer alguna foto, no dudarán en perseguirte para ver si les das algo de comida (luego nos hemos enterado que son famosos por comerse las gomas de los limpiaparabrisas de los coches!!!).
Al cruzar el tunel bajamos de nuevo al fondo del valle, donde empieza el Fiordo de Milford, pero esto lo dejaremos para mañana...
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